Rastrojos y esperanzas

Y en la frialdad quimeras maltrechas habitan el olvido, desnudo ante la noche se desparraman mis sueños tullidos.

Son rastrojos sin esperanza que nunca encontrarán su sino, la beldad que ya es ceniza no alimenta mis latidos.

Miserables y mediocres son los pájaros de ensueño que funestas realidades pregonaron al viajero.

Caminante que solloza, pues su pena aún persiste en la falsa profecía de que algo aún existe.

Y resisten corazones, contradicen mis andanzas, mi pecado que es ser fuerte en la muerte y la bonanza.

Y cambiando de camino se conserva la alegría, nunca supe a ciencia cierta si es tu suerte o es la mía.

David López Mejuto.